Cientos de personas acompañaron ayer a Nuestra Señora del Carmen en su XIII romería fluvial por el Pisuerga. Un año más, la nave de la Virgen fue llevada río abajo acompañada en todo momento por diferentes tipos de naves como piraguas, zodiacs o embarcaciones, entre las que destacaba la barca principal, que había sido decorada con flores horas antes por voluntarios y devotos. Pero este año hubo que lamentar un pequeño incidente justo cuando estaba terminando la procesión, ya que la talla cayó al agua al pasar una embarcación a gran velocidad, aunque el incidente no fue a mayores.
Como ya es tradición, fueron cientos de personas las que a partir de las 12.00 horas siguieron el festejo procesional a lo largo de toda la orilla al ritmo de vítores a la Virgen y de la música de dulzainas y tambores